Recubierta casi en un 90% de bosques, la provincia de Nuoro surge entre las provincias de Sassari, Oristano y Cagliari, en el centro de una isla maravillosamente rica, tanto desde el punto de vista paisajístico como cultural.
Su territorio, entre suaves y verdes valles, híspidas montañas, imponentes precipicios e inolvidables costas marinas con calas paisajísticas y playas incontaminadas, alberga una flora y una fauna variegada y única, que hacen de estos lugares un corazón batiente de vida, que hay que descubrir.
Si desea hacer un viaje descubriendo una tierra fecunda y un pueblo rico en tradiciones, sin tener que elegir necesariamente destinos demasiado exóticos, la provincia de Nuoro ofrece todas las posibilidades de unas vacaciones “green”, acorde a las condiciones de un turismo sostenible.
La primera etapa de nuestro viaje es Dorgali, uno de las localidades más interesantes por la extraña belleza de sus paisajes. Posee una historia muy antigua, y prueba de ello son los hallazgos arqueológicos que se remontan a la civilización “nurágica”, de la que se puede sentir aún su potencia, gracias a la presencia de numerosos “nuraghi” y poblados que se remontan a aquella época. Dorgali es conocida más que nada por Cala Gonone, una espectacular bahía que seduce a los turistas con sus aguas tranquilas, de un azul intenso. Las costas de Dorgali, sin carreteras ni asentamientos urbanos que podrían estropear su fascinación salvaje, representan hoy en día una de las atracciones más significativas de la Cerdeña oriental.
Los amantes del deporte, sobre todo, aquellos a los que les gusta mantenerse en forma al aire libre, podrán aprovechar los senderos, las pendientes y los pequeños caminos de este lugar encantado, para practicar numerosas actividades más o menos extremas: desde la equitación hasta el senderismo, pasando por la escalada libre o el parapente, sin olvidar el bungee jumping y el submarinismo. Además de las bellezas paisajísticas, Dorgali cuenta con una tradición artesanal muy arraigada, sobre todo, por lo que se refiere a la elaboración de joyas de oro, alfombras, cerámicas y objetos de piel. Un evento que no se pueden perder es el Cala Gonone jazz, festival de música que alegra las noches de verano de la comunidad desde ya más de veinte años.
Si nos desplazamos hacia el sur de Nuoro, Orosei es nuestra segunda etapa. Una vez vistas las maravillas de Dorgali, uno puede pensar que es difícil quedar sorprendidos de nuevo por cualquier otra cosa. Y, sin embargo, así es, Orosei, con su luminosidad, las anfractuosidades, las vistas y sus llamativos colores, consigue encantarnos de nuevo. Bosques verdes y amplios enmarcan una costa caracterizada por playas blancas en las que se pueden admirar arrecifes de granito rosa, que con su delicadeza dan al lugar una indescriptible sensación de ligereza y magia. También el verano de Orosei está lleno de eventos y música, pero uno de los eventos más característicos es, sin duda, la Semana Santa, que tiene sus orígenes en el siglo XVII, cuando los españoles vivían en estas tierras. Sus ritos se han convertido en parte de la cultura sarda, que los recuerda aún hoy con procesiones caracterizadas por una intensa emoción y un gran simbolismo.
Conservemos aún un poco de energía para dirigimos hacia la encantadora Posada. Posada es un característico pueblecito medieval, que surge sobre una colina calcárea desde la cual se pueden admirar unas vistas que, de nuevo, nos dejarán sin aliento. Toma su nombre del río que lo atraviesa y que hace sus tierras increíblemente fértiles. Su castillo, denominado Fava, reproduce una escenografía verdaderamente particular. Domina el pequeño centro urbano, bajo un cielo azul claro y sereno. Entre pequeñas callejuelas y tiendecitas, en Posada se celebran algunas de las fiestas mayores más esperadas en la provincia de Nuoro: la de Santu Jubanne, que tiene lugar el 24 de junio, y Santu Miali, el último domingo de agosto. También aquí encontramos playas inolvidables, entre las más conocidas: Orvili, que se extiende a lo largo de un verde pinar, y Su Tiriartzu, de unos 5 Km de longitud, con aguas bajas, tranquilas y fondos marinos con numerosos peces de colores.
¿Sabía que…?
Nuoro es la tierra natal de muchísimos artistas, como Grazia Deledda, la famosa escritora que recibió el premio Nobel de literatura en 1926. En la Iglesia de la Soledad se puede visitar el monumento dedicado a la misma, realizado por la artista Maria Lai. Además, la casa donde vivió se ha convertido hoy en día en un museo abierto al público.