RAVENNA | EMILIA ROMAGNA

Visitar Ravenna

Ravenna, provincia emiliana, es la ciudad de los mosaicos. Tiene un origen muy antiguo como atestiguan los bonitos edificios de su casco antiguo como el “Palazzo Comunale”, la Catedral y el “Duomo”. El “Duomo” es del siglo V, reconstruido en el siglo XVII de estilo Barroco. En el Baptisterio Neoniano se encuentran unos maravillosos mosaicos.
Los mosaicos son un importantísimo documento de la historia de la Ravenna de las distintas dominaciones romana, bárbara y bizantina de la ciudad.
En la Basílica de San Vital y en el Mausoleo de “Galla Placidia” (“Colombe che si abbeverano”, “Il Buon Pastore”) pueden admirar una serie de extraordinarios mosaicos.

En Sant'Apollinare Nuovo pueden visitar los mosaicos “Il Corteo delle Vergini” y el “Cristo Redentore”. La Basílica de “Sant'Apollinare Nuovo” fue construida en el siglo V por deseo de Teodorico. Fuera de la ciudad visiten “Sant'Apollinare In Classe" y, en su interior, el mosaico “Trasfigurazione” una obra del siglo VI. Debido a la gran importancia de los mosaicos Ocho monumentos de Ravenna han sido declarados Patrimonio de la humanidad por la UNESCO.
En la parte septentrional de Ravenna pueden visitar el Mausoleo de Teodorico con sus imponentes bloques de piedra d'Istria.

En la provincia de Ravenna encontramos la bellísima localidad de Bagnacavallo. Muchos visitantes tienen la impresión de conocer ya este maravilloso pueblo. En efecto, es probable visto la estrecha unión entre la ciudad y el cine. Muchos e importantes directores han elegido Bagnacavallo como escenario de sus películas, en particular, Piazza Nuova.
Piazza Nuova posee una forma elíptica encerrada en un pórtico, mientras en Piazza della Libertà pueden visitar el Ayuntamiento, el “Teatro Goldoni”, la “Torre Cívica” y el “Palazzo Vecchio”. Brisighella y Cervia son otras importantes localidades del territorio de Ravenna. En Cervia pueden visitar la Iglesia del Sufragio, dentro de la cual se encuentra un crucifijo de madera del siglo XIV. Merece también una visita el “Museo del Sale di Cervia” con sede en dos almacenes de la sal restaurados. Brisighella aunque es muy fría en invierno está rodeada por olivos, de los que se obtiene un excelente aceite. Brisighella fue el lugar elegido, como sede para sus propios establos, de los cuidadores de asnos que llevaban el yeso, curioso hecho dada la altura del pueblo. Otra curiosidad de Brisighella es el hecho de que desde el siglo XVI hasta nuestros días ha sido la ciudad natal de nada menos que ocho cardenales.

En el territorio de Ravenna, la ciudad de Lugo es conocida por haber sido el lugar de nacimiento del famoso caballito rampante, símbolo de Francesco Baracca en un primer momento y después, elegido por Enzo Ferrari, para sus automóviles.